Corea del Norte cambia a ritmo de pizzas, hamburguesas y celulares
Kim Jong Un, el nuevo líder supremo de la nación norcoreana.
En el intento por forjar una nueva imagen de sí mismo y de su país, el juvenil líder supremo de Corea del Norte, Kim Jong Un está permitiendo a las mujeres llevar pantalones, zapatos de plataforma y aretes, aumentando la disponibilidad de teléfonos móviles, aprobando alimentos hasta ahora prohibidos como la pizza, las papas fritas y las hamburguesas -y dándoles a los niños viajes gratuitos a zoológicos y parques de atracciones.
El foco del líder veinteañero está puesto en la generación más joven. Siguiendo los pasos de su abuelo, el fundador Kim Il Sung, ha anunciando planes para crear una “nación-paraíso de los niños”.
“Esto es parte de su empeño por ofrecer una impresión cálida y paternal como su abuelo”, dijo Dong Yong-Sueng, especialista en Corea del Norte del Instituto de Investigación Económica Samsung.
Kim Jong Un, quien asumió oficialmente el título de jefe supremo el 28 de diciembre del pasado año tras el funeral de Estado de su padre, Kim Jong Il, quiere establecer una imagen que se remonta a lo que algunos norcoreanos recuerdan con nostalgia como los mejores tiempos bajo su abuelo en los años 70, un momento en que el país fue respaldado económicamente por la Unión Soviética y había comida suficiente para alimentar a la nación.
El padre de Kim Jong Un gobernó el país desde 1994 y fue visto como un líder fuerte, pero frío.
La imagen del patriarca supremo tiene particular significado en una sociedad fuertemente controlada, donde la gente suele referirse a su líder como “Padre de la Nación”, a quien veneran con “amor eterno”, y usan otros extravagantes calificativos como el Sol, el Universo, General Eterno o Querido Líder.
Kim Jong Un ha tratado de simbolizar públicamente la energía juvenil del país.

Imagen tomada de la television estatal de Corea del Norte.
A los niños invitados, escogidos por funcionarios del Partido del Trabajo de Corea [comunista], se les dio la oportunidad de visitar los zoológicos y parques de atracciones y asistir a conciertos. Una entusiasta multitud infantil se vio jurar lealtad, gritando y llorando al ver a su nuevo líder usando la simbólica pañoleta de color rojo que los niños acostumbran a llevar.
Kim, educado en Suiza durante su adolescencia, ha puesto en marcha numerosos cambios políticos para permitir a la gente más libertad y diversión en su vida cotidiana. El pasado mes la televisión estatal norcoreana mostró una imagen de Kim con un sombrero de paja y una enorme sonrisa durante una visita al Parque de Atracciones de Mangyongdae, apuntando hacia una montaña rusa.
El parque había importado recientemente nuevas atracciones de Francia. Kim, según el informe transmitido, ordenó a los administradores mantener los paseos en marcha y funcionando en todo momento, y mejorar el área de juegos electrónicos de video para los ciudadanos, especialmente los niños. Kim también fue visto recorriendo el restaurante de comida rápida del parque, donde se venden hamburguesas y papas fritas.
Delicias occidentales y mujeres en pantalones
En el pasado, estas delicias eran consideradas demasiado occidentales y fueron prohibidas. Pero ahora están aprobadas por el partido comunista. “Estas instalaciones son eternos regalos de nuestro Gran Líder para nuestro pueblo”, informó la televisión estatal.
Otro popular cambio de política fue que Kim impulsó para conquistar a la gente fue el levantamiento de la prohibición que impedía a las mujeres usar pantalones en público.
“La norma fue propuesta por Kim a su padre en 2010. Eso marcó el comienzo de una revolución de la moda en Corea del Norte”, dijo Dong.
Las únicas ocasiones en que a las mujeres se les permitía usar pantalones era cuando iban a trabajar en las fábricas o en el campo. Cualquier mujer que transitara en pantalones por las calles estaba sujeta a una advertencia de la policía o a una multa.

Surcoreanos miran hacia Corea del Norte desde el Observatorio de la Unificacion, en la zona desmilitariza al norte de Seul.
Pero aun bajo las severas restricciones impuestas, las mujeres no dejaron de seguir la moda, incluyendo los tintes de su cabello.
“Sí, teníamos hambre, pero deseábamos vernos hermosas como cualquier mujer”, explicó Park tímidamente en su nueva casa en Seúl.
Las mujeres norcoreanas con jeans pegados al cuerpo y aretes son presentadas a menudo en las noticias de Corea del Sur, ya que tales atuendos eran conocidos por ser confiscados en virtud de considerárseles demasiado capitalistas. Sin embargo, la tendencia ha sido visible en los últimos años, y ahora los zapatos de plataforma están en demanda.
“Los tacones hacen que las piernas parezcan más largas”, explica Dong.
Las zapatos de plataforma ocuparon el segundo lugar entre los 10 artículos más populares en la sociedad de Corea del Norte el pasado año, según el análisis realizado por el Instituto de Investigación Económica Samsung. El estudio se basa en el promedio de lo que adquirieron los norcoreanos, empleando información de desertores, medios periodísticos y otras fuentes.
Auge del mercado negro
“Los medios de comunicación internacional tienden a mostrar a los privilegiados en Pyongyang, o a los pobres azotados por el hambre en las regiones del norte. Sin embargo, nuestra elección de lo que es popular se hace estrictamente enfocada en la vida cotidiana real de una familia promedio”, explicó Dong.
No hay manera de determinar cómo la magnitud de un porcentaje en Corea del Norte se refleja en nuevos productos o en su disponibilidad general. El gobierno siempre ha sostenido que todos los ciudadanos son iguales.
Según el análisis del Instituto Samsung, el número uno entre los productos de mayor consumo lo ocuparon las briquetas de carbón, usadas como combustible en los hogares. Después de que Kim Jong Un anunció una “gran nación próspera” como su promesa de toma de posesión, el régimen incrementó la producción de carbón para la exportación en grandes cantidades, a cambio de bienes chinos que mejoren la calidad de vida.
Pero el estudio también encontró que estos carbones, fácilmente convertidos en briquetas, fueron sacados de contrabando hacia el mercado negro de Corea del Norte, haciendo caer sus precios.
El artículo mencionado como número 3 detrás de las briquetas de carbón y los zapatos de plataforma fue el teléfono celular. Los suscriptores de Orascom de Egipto, proveedor de la red única de Corea del Norte, pronto llegarán a un millón este año. En realidad, muchos más habitantes norcoreanos en los pueblos fronterizos poseen ilegalmente teléfonos móviles comprados en China.
Celulares y restaurantes privados
La hermana mayor de Park, residente en Corea del Norte, posee un móvil y se comunica regularmente con ella en el Sur cuando realiza viajes de negocios a la frontera con China, dos veces al mes. Las hermanas se han reunido cada uno o dos años en China. Park dijo que cada vez que se reúnen, las peticiones de su hermana son mayormente de vestidos y zapatos de plataforma.
“Mi hermana me dice que ahora hay incluso una pizzería italiana y cafés en su ciudad natal… y mi sobrino pequeño acaba de tener su primera torta real de cumpleaños, no hecha de arroz sino al estilo occidental, gracias a una nueva panadería”, relató Park mostrando fotos de la familia de su hermana.
Se ha reportado que Kim Jong Un ordenó un incremento del número de licencias para la gestión de restaurantes privados, con el propósito de darle a las ciudades una apariencia robusta y vital.
“Un montón de opciones existen ahora si usted tiene suficiente dinero en Corea del Norte”, dijo. Los testigos dicen que la gente está aprendiendo a disfrutar del café, una bebida rara en un país donde la autosuficiencia y, por tanto, “los productos estrictamente de cosecha propia” permanecen en el centro de sus valores socialistas.
La marca más popular disponible es el café instantáneo Maxim, realizado en Corea del Sur. El café se introduce de contrabando en el norte a través de China.
Descubriendo el chocolate
Otro producto de Corea del Sur de creciente consumo en el Norte es el Choco-pie, un pequeño pastel cubierto de chocolate y relleno de bombones. La mayoría de ellos se trasiegan a través del Parque Industrial Gaesong, justo por encima de la frontera Norte-Sur, donde las fábricas surcoreanas emplean a 50,000 trabajadores norcoreanos. Cada uno recibe de dos a tres pasteles como refrigerios diarios, pero la mayoría de los trabajadores guardan los dulces para venderlos en el mercado negro.
“Eso significa que entre 100,000 y 150,000 Choco-pies se deslizan en el mercado negro todos los días. Los Choco-pies son como dinero para estas personas”, manifestó Park.
Estos cambios en la alimentación y la moda que Kim Jong Un parece abrazar son resultado del impacto de la cultura extranjera y la información. El dulce sabor del capitalismo se ha extendido a costa de un régimen paranoico que tradicionalmente trató de aislar a su población de la influencia foránea.
Pero una parte sustancial de la población de Corea del Norte tiene ahora acceso a la información del mundo exterior a través de la televisión extranjera, la radio y los reproductores de DVD, de fácil acceso por vía del contrabando. La difusión de USBs y MP4s que contienen programas populares de Corea del Sur o dramas ha sido viral, y la conciencia de la población norcoreana sobre el mundo exterior ha crecido de manera exponencial, según un estudio reciente publicado por la encuestadora InterMedia Survey.
*Publicado por el sitio ABC News. Traducción: Café Fuerte.