Escándalo sobre el ring en Arabia Saudita: ¿Boxeo o pantomina?
La pelea entre el multicampeón Saúl "Canelo" Álvarez y el cubano William Scull para unificar la corona de las 168 libras, es calificada ya como la peor de la historia. El mexicano se llevó la victoria por votación unánime.

Por Alberto Águila
Fue realmente escandalosa la publicitada pelea de la noche de este sábado en Arabia Saudita, en la que Saúl “Canelo” Álvarez, boxeador mexicano multicampeón en la categoría de las 168 libras, venció por decisión unánime al desconocido cubano William Scull. Un combate tan inexistente por parte del matancero y tan deslucido por lo que correspondió al Canelo, que algunos cronistas deportivos la han llamado ya “la peor pelea de la historia”.
El Canelo, estuvo persiguiendo todo el tiempo a su oponente por todo el ring de The Venue, en la ciudad de Ria. Scull llegó al controversial pleito con el título de la Federación Internacional del Boxeo, pero nada exhibió que no resultara olvidable. Convertido en un decepcionante correlón, se vio muy temeroso, tratando por todos los medios de no ser alcanzado por los ganchos que escasamente pudo tirar el pelirrojo de Jalisco que ya tiene sobre el cuadrilátero 20 años de sus 34 cumplidos. Los asistentes y gran cantidad de aficionados desde varias latitudes del mundo han mostrado su disgusto tras pagar por lo que debía ser una gran batalla y no fue más que una aburrida escaramuza, con ausencia del principal condimento: boxeo.
Las tarjetas (115-113, 116-112 y 119-109) resultan un poco raras, con disparidades señaladas para confirmar la unanimidad de la decisión a favor del Canelo, que logró unificar los títulos de peso supermediano en el complicado mapa del boxeo profesional.

De manera que cualquier análisis no debe pasar de ahí en esta pantomima boxística que –como podía presumirse– estuvo condicionada a mucho, muchísimo dinero, y poco espíritu deportivo.
¿Quién es el cubano?, se preguntaron miles de aficionados del pugilismo al anunciarse sorpresivamente el combate. Desde hace unos años Scull, que debutó en 2016, no pelea por la isla. Archivaba 23 combates como profesional en el exterior (Argentina y Europa), todos ganados, frente a contendientes sin nombre relevante. El chance con el monarca de tres organizaciones, se produjo debido a que Canelo, había perdido con antelación una de sus fajas al no competir en la fecha indicada. Hubo entonces una eliminatoria para encontrar al nuevo dueño del fajín de los pesos supermedianos de la Federación Internacional de Boxeo en la que salió victorioso el cubano.
El ganador del descafeinado pleito en Arabia Saudita se llevó una bolsa de alrededor de $100 millones de dólares y el perdedor recibirá entre $1 y $3 millones.
El mexicano volverá al encerado el 12 de septiembre en Las Vegas, Nevada, contra Teren Crawford, una de las pocas estrellas en el mundillo de las 12 cuerdas. El boxeador antillano tendrá tiempo para reflexionar acerca de su dudoso estilo de competir siempre en “marcha atras” –como hacen sus compatriotas de estos últimos tiempos– o se decide a tirar más y mejor como hicieron los púgiles criollos que nos dieron lecciones y gloria sobre el ring el siglo pasado.