Juicio a Alan Gross será el 4 de marzo

Juicio a Alan Gross sera el 4 de marzo El juicio contra Alan Gross, el contratista estadounidense detenido desde hace 14 meses en Cuba, comenzará el 4 de marzo, informó este jueves un portavoz del Departamento de Estado.

La fuente dijo a CaféFuerte que la información le fue comunicada a las autoridades de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana en la tarde del miércoles.

Gross recibió simultáneamente la comunicación del juicio, indicó el funcionario.

La información apareció hoy en el sitio digital Cubadebate, que confirmó la fecha del proceso judicial en el Tribunal Provincial Popular de La Habana.

Gross, de 61 años, enfrentará acusaciones bajo el delito de Actos Contra la Independencia o la Integridad Territorial del Estado, de acuerdo con el Artículo 91 del Código Penal.

La fiscalía pide una pena de 20 años de cárcel y el caso será juzgado en la Sala de Delitos contra la Seguridad del Estado del mencionado tribunal.

Se conoce que para su defensa fue designada -al menos formalmente- la abogada Nuris Piñero Sierra, directora del Bufete de Servicios Especializados de La Habana. Piñero es la abogada que representa a las familias de los cinco agentes cubanos condenados por espionaje en Estados Unidos,

Gross fue detenido el 3 de diciembre del 2009 aunque no se informaron los cargos en su contra hasta el 4 de febrero.

El anuncio sobre el juicio coincidió con críticas declaraciones del presidente Barack Obama respecto a Cuba en ocasión del primer aniversario de la muerte del prisionero político Orlando Zapata Tamayo, fallecido tras una huelga de hambre de 85 días.

La noticia del enjuiciamiento se hizo mediante una nota oficial publicada a comienzos de este mes por el diario Granma y provocó un inmediato rechazo del Departamento de Estado, que consideró el encausamiento como “deplorable”.

Una agria disputa

El tema del arresto y encausamiento de Gross es actualmente el principal punto de fricciones entre Washington y La Habana. La Casa Blanca considera que la retención del contratista estadounidense hace imposible avanzar una agenda de diálogo entre ambos países.

En un reciente video del Ministerio del Interior (MININT) filtrado a la internet, una analista cibernético de contrainteligencia califica a Gross como un nuevo tipo de mercenario que viajó a Cuba para “tumbar la revolución”.

Desde su arresto en La Habana, el caso de Gross ha generado una agria disputa entre ambos países. El Departamento de Estado ha desplegado una intensa actividad diplomática con aliados de Washington para que intercedan ante el gobierno de Raúl Castro en favor del contratista detenido, que se encuentra actualmente severamente afectado de salud y bajo supervisión médica.

El nombre de Gross ha emergido como punto de discusión en las conversaciones migratorias mantenidas por delegaciones de Cuba y Estados Unidos durante los últimos dos años.

Pero Cuba se ha mantenido inflexible respecto a Gross, a quien se considera una potencial pieza de canje con los cinco agentes cubanos que cumplen largas condenas por espionaje en Estados Unidos.

La Habana ha asegurado que otorgará todas las garantías procesales para el juicio de Gross y que permitirá la asistencia de sus familiares a las audiencias del caso.

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