Maduro entregará 20 mil autos a los militares

Autos de empresas mixtas con China e Irán para beneficio de los militares.

Es una clara iniciativa para beneficiar a los mandos militares en momentos en que el chavismo se juega sus cartas más preciadas: el presidente Nicolás Maduro aprobó fondos para la compra de 20,000 vehículos que serán entregados a los miembros de las Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas (FANB) en el curso del presente año.

 El ministro de Defensa, Diego Molero anunció esta semana la entrega de los primeros 88 vehículos tipo Orinoco y Arauca, pertenecientes al sello de Chery, la empresa mixta con China, a miembros de la FANB. “No solamente hay carros de este tipo sino que hay otros como Aveo, Corolla, Corsa que vamos a ir entregando en el marco de la Gran Misión Negro Primero”.

La movida recuerda nevitablemente los métodos de estimulación de la Cuba castrista hacia sus generales y altos oficiales. Aquellos Ladas y Moshkovichs eran el trofeo por la lealtad histórica o la misión internacionalista cumplida. Un estatus en la nomenclatura castrense. Para Maduro se trata de las golosinas con que se trata de comprometer a unas Fuerzas Armadas atrapadas en la incertidumbre y abocadas a un proceso de forzosa radicalización política.

Caja de Pandora

Es oportuno recordar que la Gran Misión Negro Primero fue proclamada por Maduro a comienzos de este mes, días antes de lanzar a 3,000 efectivos a patrullar las calles venezolanas en un simulacro de seguridad en un país convulsionado por la política y los desaciertos de la imposición chavista.

“Regresando a la Patria aprobé los programas y recursos para la Gran Misión Negro Primero. Protección para nuestra FANB y la familia militar”, escribió Maduro. Estaba entonces retornando a Caracas de su gira por los países del MERCOSUR en busca de legitimación externa, y nada mejor que cerrar filas con el bloque castrense que representa, en última instancia, su garantía de permanencia en el poder. La inconformidad dentro de las filas militares venezolanas es hoy una caja de sorpresas y puede ser mañana una caja de Pandora.

Según dice el gobierno, la Gran Misión Negro Primero es un programa social en el mejor estilo chavista, diseñado por el nuevo gobierno para “proteger a los soldados de la patria y a sus familias, además garantizar una infraestructura y las condiciones de servicio de la Fuerza Armada”. El nombre del programa rinde homenaje al militar venezolano Pedro Camejo, un guerrero independentista que luchó al lado del Libertador Simón Bolívar.

Como el neochavismo suele ser tan precipitado y procaz, para nadie pasó inadvertido el hecho de que esta maniobra populista se agitara en vísperas de poner en marcha el plan de seguridad Patria Segura en la Gran Caracas. No deja de tener un carosimbolismo que los primeros autos fueran otorgados al calor de las revelaciones de la demoledora grabación del periodista Mario Silva con un agente de la inteligencia cubana, lo que ha dejado en harapos la cacareada unidad inquebrantable de los chavistas.

Pantomima de control

“En esta revolución hay cabida para todos los ciudadanos venezolanos sea cual sea la clase social y la condición política. Este es un gobierno de amor, de inclusión y de paz”, repitió el Ministro de Defensa mientras inauguraba este martes la sede de Automotores Ipsfa en Los Próceres, un centro automotor que prestará servicio de mantenimiento a la población militar y civil que adquieran los vehículos Chery o los Venirauto, esta última marca fruto de la empresa mixta venezolana-iraní que está en funciones desde el 2006.

En su desenfrenada pantomima de control y normalidad, la cúpula chavista no solo entrega carros a los uniformados. También vende la imagen de un país que amplía su capacidad militar recuperando misiles con la ayuda de “técnicos cubanos”.

Este miércoles en La Orchila fue lanzado el misil Otomat MK-2 como parte de la reparación del sistema de artillería venezolano. En el acto para presenciar el lanzamiento del cohete hacia un objetivo no precisado estaban Maduro, Diosdado Cabello y el ex vicepresidente y ex ministro de Defensa, José Vicente Rangel, otro de los mecionados en la grabación del Hombre de “La Hojilla”.

Espectáculo, apariencia y teatralidad. Un país que concede autos y lanza misiles anda corriendo para importar de emergencia $79 millones de dólares en papel higiénico, toallas sanitarias y pasta dental. Todo está revuelto en esta Venezuela que nos dejó Hugo Chávez.