Juan de los Muertos, cuarto filme cubano que alcanza el Premio Goya

El realizador Alejandro Brugués junto a tres actores del elenco de Juan de los Muertos, en la ceremonia de premiaciones del Goya.

El realizador Alejandro Brugués junto a tres actores del elenco de Juan de los Muertos, en la ceremonia de premiaciones del Goya.

Por Daniel Benítez

Juan de los muertos, la irreverente comedia de zombies cubanos de Alejandro Brugués, se llevó este domingo el Premio Goya 2012 a la mejor película iberoamericana.

El filme cubano competía con la cita argentina Infancia clandestina, de Benjamín Ávila; la paraguaya Siete cajas, de Juan Carlos Maneglia y Ana Schembori; y la mexicana Después de Lucía, de Michel Franco.

Emocionado y sorprendido por el otorgamiento del trofeo, Brugués subió al escenario junto a tres actores del elenco.

“Apúrense, que si lo tocamos ya no nos lo pueden quitar”, broméo el cineasta. “Esto es muy grande,  demasiado”.

Con respiración entrecortada, Brugués agradeció a sus productores y a todos los que confiaron en su proyecto, y a los académicos españoles, porque “han abierto una puerta para el cine independiente cubano que nadie va a poder cerrar”.

El realizador cubano-argentino dedicó el premio a su esposa, “que cada mañana hace que me levante con ganas de contar historias”.

Sin nada, hacemos de todo

Seguidamente, con lágrimas visibles, los  actores Alexis Díaz de Villegas y Jazz Vilá agradecieron el recibimiento del premio.

“Gracias también para todos los cubanos, para los que hacen posible el cine en Cuba, donde no hay de nada pero hacemos de todo”, exclamó Vilá a los asistentes a la La ceremonia, realizada en el Centro de Congresos Príncipe Felipe de Madrid.

Sin embargo, el triunfo de Brugués no fue muy favorablemente asimilado por los medios cubanos y algunos periodistas oficialistas se lanzaron a cuestionar el galardón, al parecer incómodos aún por el cuestionamiento social y la sátira política que envuelve a trama.

En las redes sociales pudieron leerse mensajes como “Creo que lo de Juan de los Muertos no era pa’ tanto!!!!”, publicado en el muro de Facebook de la periodista Leticia Martínez, del diario Granma, y Karina Marrón, sudirectora del periódico ¡Ahora! (Holguín), escribió: “Que me perdonen los patriotas a ultranza y los críticos por meterme en su terreno, pero en mi opinión el Goya ha decaído mucho, o el cine Iberoamericano, si Juan de los muertos es la mejor película”.

El sitio Cubadebate se conformó con una nota de compilación con despachos de agencias y este lunes -a pesar de ser la información cultural de mayor trascendencia en la isla- la noticia había sido relegada a un segundo plano. Mientras, en la edición impresa del Granma mereció tres párrafos, de ellos uno para decir con quienes competía y otro para reflejar los galardones de Blancanieves, la cinta española dirigida por Pablo Berger y que se alzó con 10 estatuillas.

Puertas cerradas

A pesar de citar a Brugués, Granma evitó mencionar sus palabras en referencia al cine independiente de la isla y a “las puertas (…) que nadie va a poder cerrar”.

Es la cuarta ocasión que un filme cubano se alza con el Premio Goya, concedido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España. Con anterioridad lo obtuvieron La Bella del Alhambra, de Enrique Pineda Barnet, en 1989; Fresa y Chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío, en 1994; y La vida es silbar, de Fernando Pérez, en 1999.

Cuba marcha en la historia de los Goya -galardón establecido en 1986- como el segundo país latinoamericano con más galardones después de Argentina, que lo ha obtenido en 14 ocasiones.

Es el segundo largometraje de ficción de Brugués, quien debutó con Personal Belongins (2006). Sus dos filmes han sido exhibidos por el Festival Internacional de Cine de Miami.

Juan de los Muertos marca la entrada de la cinematografía cubana en el cine fantástico. Una horda de zombies ávidos de carne humana asola las calles de La Habana, mientras se difunden reportes oficiales de que los revoltosos son grupúsculos disidentes al servicio de Estados Unidos. En medio de la confusión y el pánico generalizado, aparece una especie de héroe que se ofrece a la gente para eliminar, por un módico precio, a sus familiares infectados.

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