Cuba y EEUU discrepan sobre Ley de Ajuste en charla migratoria; Fundación anuncia plan para cubanos varados en Centroamérica

Por Redacción CaféFuerte
Las conversaciones migratorias entre Cuba y Estados Unidos concluyeron este lunes con un previsible desacuerdo sobre la aplicación de la Ley de Ajuste Cubano (CAA) y falta de resultados concretos sobre el principal tema de actualidad que ambas partes se comprometieron a discutir: la crisis de miles de inmigrantes cubanos varados en Centroamérica.
El comunicado de la parte cubana al término de la reunión de este lunes en Washington reiteró la postura cubana de culpar a la CAA, la política de pies secos/ies mojado y -ahora de manera cada vez más insistente- el programa especial de refugio para médicos desertores como causantes de la emigración irregular y desordenada de cubanos hacia Estados Unidos.
“La delegación cubana reafirmó su rechazo al “Programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos”, establecido por el gobierno de George W. Bush en 2006, para alentar a médicos y otro personal cubano de la salud a abandonar sus misiones en terceros países y emigrar a los Estados Unidos. Recalcó que esta es una práctica censurable dirigida a dañar los programas de cooperación cubanos y a privar de recursos humanos vitales a Cuba y a muchos países que los necesitan”, señaló el comunicado, publicado la noche del lunes en la prensa oficial.
Sin detalles oficiales
Pero ninguna de las partes manifestó haber discutido posibles salidas a la crisis migratoria que afecta a unos 5,000 cubanos, varados en costa Rica, Panamá y Colombia.
Antes de iniciarse las conversaciones bilaterales, el Departamento de Estado emitió una comunicación sobre las consideraciones que su delegación llevaría a la mesa de negociaciones sobre el tema migratorio, incluyendo la ratificación de la CAA y la crisis de cubanos en Costa Rica. Pero hasta ahora no ha habido detalles sobre lo presentado en el diálogo entre los reperesentantes de ambos gobiernos.
Curiosamente, las noticias más significativas sobre los inmigrantes cubanos de Centroamérica no emanaron de Washington, sino de costa Rica y Miami.
El vicecanciller constarricense Alejandro Solano anunció que este martes se reunirán en México representantes de Costa Rica, México y Guatemala para coordinar posibles soluciones a la crisis de los inmigrantes cubanos que transitan por la región con rumbo a Estados Unidos. Además de Solano, asistirán a la reunión la subsecretaria de Relaciones Exteriores de México, Socorro Flores, y el vicecanciller de Guatemala, Carlos Ramiro Martínez.
“Vamos a continuar las coordinaciones de lo que sería el traslado de los cubanos hacia Estados Unidos siguiendo la ruta que se vaya a acordar entre los países que estamos interesados en garantizar la dignidad humana”, declaró Solano.
¿Un nuevo programa Exodo?
Entre tanto, sobre el traslado de los cubanos a suelo estadounidense también se pronunció la Fundación Nacional Cubanoamericana (FNCA) en Miami. Jorge Mas Santos, presidente de esa organización, anunció que se trabaja en un plan para ayudar a los cubanos atascados en Centroamérica. Según Mas Santos, se busca una “solución creativa” en acuerdo con la administración Obama, de manera que los cubanos que vengan a Estados Unidos no se conviertan n una carga pública, sino que tengan el patrocinio de familiares.
El plan de la FNCA tiene características similares al programa Exodo, que trajo a Estados Unidos a miles de cubanos varados en numerosos países en los años 80 y 90, tras el desplome del bloque soviético.
En cuanto a las conversaciones de Cuba y Estados Unidos, que según el comunicado oficial de La Habana transcurrieron en “un un ambiente respetuoso y profesional”, ambas partes saludaron  los resultados positivos que tuvo el encuentro técnico bilateral sobre fraude migratorio, celebrado en marzo de 2015 en La Habana y que va a reeditarse en Washington el próximo año.
La batalla contra el fraude migratorio es un área de colaboración bilateral desde hace unos años, desde que comenzaron a proliferar los falsos certificados de nacimiento, vendidos a extranjeros en Miami, para presentar su solicitud de residencia legal bajo la CAA.
Ambas delegaciones volverán a reunirse este martes en Washington para abordar el tema del enfrentamiento al narcotráfico.
Reproducimos a continuación el comunicado de la delegación cubana al finalizar la ronda de conversaciones de este lunes y la declaración del Departamento de Estado, previa al inicio de la reunión:
COMUNICADO DE LA DELEGACIÓN CUBANA A LA RONDA DE CONVERSACIONES MIGRATORIAS ENTRE CUBA Y ESTADOS UNIDOS
El 30 de noviembre de 2015, se realizó una nueva ronda de conversaciones migratorias entre delegaciones de Cuba y los Estados Unidos, presididas, respectivamente, por la directora general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, Josefina Vidal Ferreiro y por el subsecretario adjunto para los Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Edward Alex Lee.
Durante el encuentro ambas partes revisaron la marcha de los Acuerdos Migratorios entre los dos países e intercambiaron sobre el enfrentamiento a la emigración ilegal. La delegación cubana reiteró, su profunda preocupación por la persistencia de un manejo politizado del tema migratorio con respecto a Cuba por parte del Gobierno de los Estados Unidos, por la vigencia de la política de la Ley de Ajuste Cubano y, en particular, por la aplicación de la llamada política de “pies secos-pies mojados”, la cual confiere a los cubanos un tratamiento diferenciado y único en el mundo, al admitirlos de forma inmediata y automática, sin importar las vías y medios que utilizan, incluso si llegan de manera irregular a su territorio.
Los representantes de Cuba insistieron en que esta política ha estimulado la emigración ilegal, insegura y desordenada, así como el tráfico de emigrantes y las entradas irregulares a los Estados Unidos desde terceros países, de ciudadanos cubanos que salen legalmente de Cuba y entran de la misma forma al primer país de destino, desde donde continúan de manera irregular hacia territorio estadounidense, convirtiéndose en víctimas de redes de traficantes de personas y el crimen organizado, tal como se ha evidenciado, más recientemente, a raíz de la situación creada en Costa Rica y otros países de la región.
La parte cubana insistió en que esta política viola la letra y el espíritu de los Acuerdos Migratorios en vigor, mediante los cuales el Gobierno de los Estados Unidos se comprometió a descontinuar la práctica de admitir a emigrantes cubanos que llegasen a su territorio por vías irregulares, para garantizar una emigración legal segura y ordenada entre los dos países.
Por su parte, la delegación estadounidense transmitió que su gobierno no tiene la intención de hacer cambios en la política migratoria que se aplica a los ciudadanos cubanos.
La delegación cubana reafirmó su rechazo al “Programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos”, establecido por el gobierno de George W. Bush en 2006, para alentar a médicos y otro personal cubano de la salud a abandonar sus misiones en terceros países y emigrar a los Estados Unidos. Recalcó que esta es una práctica censurable dirigida a dañar los programas de cooperación cubanos y a privar de recursos humanos vitales a Cuba y a muchos países que los necesitan.
La representación cubana recalcó que tanto la política de “pies secos-pies mojados” como el “Programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos” son incoherentes con el contexto bilateral actual, entorpecen la normalización de las relaciones migratorias entre Cuba y los Estados Unidos y generan problemas a otros países de la región.
En la ronda, que se desarrolló en un ambiente respetuoso y profesional, se evaluaron otros aspectos de las relaciones migratorias, incluyendo el cumplimiento de los acuerdos vigentes, la emisión de visas para emigrantes y visitas temporales, las acciones de ambas partes para enfrentar la emigración ilegal, el contrabando de personas, así como el fraude de documentos. Las dos delegaciones coincidieron en los resultados positivos que tuvo el encuentro técnico bilateral sobre fraude migratorio, celebrado en marzo de 2015 en La Habana, el cual acordaron reeditar el próximo año en Washington.
La delegación de Cuba expresó satisfacción por la realización en abril de una videoconferencia sobre un nuevo procedimiento de comunicaciones entre Tropas Guardafronteras de Cuba y el Servicio de Guardacostas de los EE.UU. (SGC) y confirmó la celebración de un nuevo encuentro técnico entre los dos servicios, en La Habana, en diciembre de 2015.
La delegación de Cuba transmitió su disposición a mantener estas conversaciones e invitó a una delegación de los Estados Unidos a viajar a La Habana durante el primer semestre de 2016 para sostener una nueva ronda.
Washington, 30 de noviembre de 2015
DECLARACION DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO
No hay ningún plan de cambiar nuestras políticas de migración con respecto a Cuba. La Ley de Ajuste Cubano es una ley que fue promulgada a mediados de la década de 1960 para darle a los cubanos un medio seguro, ordenado y legal para emigrar a  Estados Unidos.
Hoy Estados Unidos y Cuba celebrarán sus conversaciones migratorias bianuales en el Departamento de Estado para continuar discutiendo la implementación de los Acuerdos Migratorios entre Estados Unidos y Cuba, que prevén la migración segura, ordenada y legal de los cubanos hacia Estados Unidos.
Somos conscientes de la situación en la que se encuentran miles de inmigrantes cubanos que viajan irregularmente desde Suramérica y Panamá  con rumbo norte a través de Costa Rica, donde han sido detenidos por la decisión de Nicaragua de cerrar su frontera.
Estamos preocupados por la seguridad  de estas personas y el tema será discutido en la reunión de hoy. Sin embargo, este es un tema que va más allá de la relación entre Cuba y Estados Unidos.
Este peligroso viaje muestra  la incertidumbre y los riesgos inherentes al implicarse con los contrabandistas y el crimen organizado en intentos de emigrar a Estados Unidos por una vía irregular e ilegal.
Vamos a proponer al gobierno cubano una discusión sobre cómo los gobiernos pueden contribuir a la lucha contra las organizaciones de contrabando que se aprovechan de los inmigrantes cubanos.
Seguimos alentando a todos los países a respetar los derechos humanos de los migrantes y garantizar el trato humano de las personas que buscan asilo u otras formas de protección en virtud de las leyes nacionales y del derecho internacional.
Si los migrantes no tienen solicitudes de asilo válidas u otra base legal para permanecer en un país, reconocemos que los gobiernos tienen el derecho soberano de devolverlos a sus países de origen. Cualquiera y todas las repatriaciones deben llevarse a cabo de forma segura y con dignidad.
Además, estamos alentando a los gobiernos regionales a encontrar soluciones a este desafío, incluyendo soluciones coordinadas e integrales que se enfoquen en prevenir pérdidas humanas, garantizar el respeto de los derechos humanos de todos los migrantes, y promover políticas de migración ordenada y humana.