Muere prisionero político del 11J por negligencia de autoridades de penal en La Habana

Luis Barrios Díaz, de 37 años, falleció en horas de la tarde del domingo en el Hospital Clínico Quirúrgico “Salvador Allende” como resultado de negligencias en la atención médica.

Muere prisionero político del 11J por negligencia de autoridades de penal en La Habana
Luis Barrios Díaz, prisionero del 11-J. Foto: X-Carolina Barrero.

El prisionero político Luis Barrios Díaz, condenado a nueve años de cárcel por participar en las manifestaciones del 11J, falleció en un hospital habanero a consecuencia de trastornos respiratorios, informó este lunes el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).

De acuerdo con el reporte, Barrios, de 37 años, murió en horas de la tarde del domingo en el Hospital Clínico Quirúrgico “Salvador Allende”, popularmente conocido como La Covadonga, como resultado de negligencias en la atención médica.

La información fue confirmada horas después por Carlos Hernández, cuñado del fallecido, en una transmisión directa desde La Habana.

“Los directivos de la prisión 1580 [San Miguel del Padrón] han cometido un asesinato”, declaró Hernández. ““Quiero que esto lo vea todo el mundo, yo puedo ser juzgado por esto pero no importa porque se tiene que saber la verdad”.

Hernández consideró que la muerte de su cuñado pudo haberse evitado si hubiera recibido atención médica a tiempo luego de tener una orden de ingreso por los médicos del Hospital Miguel Enríquez, La Benéfica, desde el 14 de noviembre, debido al deterioro de su salud.

La información obtenida por el OCDH desde dentro de Cuba indica que Barrios venía presentando problemas respiratorios desde agosto pasado, motivo por el cual fue ingresado en la enfermería de la prisión 1580, ubicada en el municipio San Miguel del Padrón, y luego trasladado al hospital para recibir atención especializada.

Los partes médicos indican que Díaz padecía una bronconeumonía que le generó líquido en un pulmón. La causa de la muerte fue un paro respiratorio.

El fallecimiento de Barrios causó de inmediato reacciones de indignación entre activistas y defensores de los derechos humanos dentro y fuera de la isla.

“Murió por la sistemática falta de atención médica, tratos denigrantes y tortura, a las que son sometidos los presos políticos en Cuba por órdenes de la Seguridad del Estado. Tenía 37 años, su único crimen fue querer vivir en libertad”, escribió la activista e historiadora del arte Carolina Barrero, residente en Madrid.

Los médicos del hospital “Miguel Henríquez” habían informado previamente a las autoridades del penal de que era indispensable el ingreso por el mal estado de salud del prisionero, pero Díaz fue devuelto a la cárcel antes de llevarlo a La Covadonga en peores condiciones.

 El reporte de la organización, con sede en Madrid, indica que las autoridades penitenciarias alegaron que no tenían combustible para garantizar una vigilancia permanente del prisionero en la sala del hospital, decisión que provocó el empeoramiento de su estado de salud y posterior fallecimiento.

Los pormenores del caso fueron proporcionados a OCDH por Endris Arias Meralla, compañero de la causa 184/2021 y amigo del fallecido.

A raíz del agravamiento de su salud, fue intervenido quirúrgicamente con urgencia el pasado sábado y fue destinado luego a la sección de terapia intensiva, donde falleció a causa de complicaciones respiratorias.

“En un intento de librarse de su responsabilidad producto de su negligencia, las autoridades tramitaron con celeridad inaudita una licencia extrapenal para el prisionero político”, señaló el comunicado.

El OCDH reiteró su exigencia de liberación inmediata de todos los presos por motivos políticos y de conciencia y recordó que aunque es un asunto de voluntad política, el régimen cuenta con suficientes vías jurídicas para excarcelar o liberar de manera inmediata a todos.

“Incluso, varios presos políticos tienen su estado de salud deteriorado, como es el caso de Félix Navarro y José Daniel Ferrer, y, según las Reglas Mandela de la ONU, la prestación de servicios médicos adecuados a los reclusos es una responsabilidad del Estado”, indicó la declaración.

La organización pidió además un pronunciamiento de los gobiernos democráticos y de la Unión Europea sobre este lamentable caso.

Barrios era vecino del reparto habanero de Párraga, en el municipio habanero de Arroyo Naranjo, y fue condenado por el Tribunal Municipal de Arroyo Naranjo por protestar en las calles el 11 de julio de 2021 bajo los supuestos delitos de  desorden público y atentado. La sentencia de su condena había sido emitida en enero de 2022.

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