Peligro de derrumbe en Terminal de Ómnibus de La Habana
Por Redacción CaféFuerte
La entrada principal de la Terminal de Omnibus de La Habana fue cercada este jueves para impedir la circulación de personas ante los peligros de derrumbe del techo de la instalación.
Las imágenes del lugar muestran una cinta alrededor de la entrada techada con un letrero que dice “Peligro Derrumbe”, y descascarados en la cobertura del techo que dejan ver las cabillas de la estructura del edificio.
Sin embargo, en los portales de la entrada permanecen personas de pie a escasos metros de cordón de prohibición.
Un empleado de la Terminal dijo que era una situación de emergencia con esa parte del techo, que está agrietado y tiene filtraciones desde hace varios años.
Reparación total
“El peligro está en esa parte de la entrada y se están haciendo las gestiones para una reparación total por el grupo empresarial ASTRO”, dijo el empleado que pidió no ser identificado.
El Grupo Empresarial de Transporte por Ómnibus (ASTRO), creado en 2005, está a cargo de la administración de la terminal habanera por los últimos 14 años.
Pero los problemas de mantenimiento de la céntrica instalación han sido sistemáticos y no es la primera vez que el techo enfrenta problemas de derrumbe.
En febrero de 2014, el desplome de una parte del techo de la terminal ocasionó lesiones graves a dos jóvenes que se encontraban esperando la llegada de familiares desde la provincia de Camagüey. En el lugar donde se produjo el derrumbe no existía un cartel o anuncio que llamara la atención sobre el peligro.
El área que colapsó entonces se encuentra en un lateral del edificio y es muy transitada por los pasajeros que buscan un taxi a su llegada a La Habana.
Obra de la modernidad
Ambas víctimas recibieron atención en el servicio de politrauma del Hospital Universitario “Calixto García” por fracturas de cráneo y de fémur.
En esa ocasión, el techo llevaba más de nueve meses en condiciones de derrumbe, con huecos y a punto de colapsar, y el paso de los transeúntes había sido interrumpido con tablones.
Ubicada en la Avenida de Rancho Boyeros y 19 de Mayo, la terminal fue inaugurada el 29 de junio de 1951 y en su momento se le consideró la segunda de su tipo más moderna y funcional del mundo, después de la de Washington DC, en Estados Unidos.
El edificio principal consta de tres niveles y la planta baja está diseñada para el despacho y la atención a los pasajeros, con salas de espera, oficina de correos, cafeterías y establecimientos comerciales de gran amplitud. Las plantas superiores fueron concebidas para las oficinas y otras dependencias.
El diseño de la instalación estuvo a cargo de la firma Moenck y Quintana, propiedad de los arquitectos Miguel Ángel Moenck y Nicolás Quintana, ambos ya fallecidos. El costo total de la obra estuvo valorado aproximadamente en tres millones de dólares.
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