Desempolvando archivos: Nicolás Guillén en su despacho

Por Celso Rodriguez*
Con esta foto tomada en La Habana hace 30 años comienzo una sección de recuerdos en esta página y que llevará por título Desempolvando archivos.

La idea es justamente recordar a través de un abultado archivo de imágenes que recuerdan figuras ilustres, momentos especiales, lugares simbólicos, instantes de una cobertura noticiosa, pero sobre todo una época cubana que está definivamente instalada en nuestras vidas y conforma parte de la memoria visual de Cuba.
Será también una ocasión para contar lo que rodeó el instante fijado al apretar el obsturador de la cámara y que la imagen no puede registrar.
La foto de hoy tiene un carácter fortuito. No recuerdo exactamente la fecha, pero el año debió ser entre 1981 y 1982. Ese día llegué a la sede de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), en el Vedado,  y me puse a conversar con la secretaria del poeta Nicolas Guillén (1902-1989). La conversación giró nada más y nada menos que sobre  el árbol de la yagruma y sus propiedades para conservar y mejorar el cabello. Cuando más animados estábamos enfrascados en esta charla, me pidió que la esperara un momento, porque Nicolás tenia que firmar unos papales atrasados.
En ese momento, le pedí permiso para seguirla y entrar al despacho para tomarle unas fotos en sus funciones cotidianas, Aceptó. Ya dentro de la oficina le propuse la foto al maestro, que estaba de buen humor. Nicolás solo me miró y empezó a firmar papeles,  Les aseguré a ambos -en tono de broma- que quedarían con 10 años  más jóvenes, al tiempo que el poeta le decía a la secretaria: “Si no te ríes, no sales en la foto”.
Y así quedó fijado este instante que ahora retomo y comparto con los lectores de CaféFuerte.
*Celso Rodríguez (Cienfuegos, 1951) es un reconocido fotorreportero y maestro de fotografía desde los días de la revista Cuba, en los años 70. Entre 2005 y 2006 trabajó en Guatemala como editor de fotografía de Prensa Libre. En la actualidad reside en Miami,