Yoennis Céspedes firma por $36 millones con los Atléticos de Oakland
Yoennis Céspedes a su llegada a Miami el 8 de febrero
En un epílogo de verdadero suspense, el pelotero Yoennis Céspedes firmó un contrato récord para un cubano en Grandes Ligas por cuatro años y $36 millones de dólares … con los Atléticos de Oakland.
Céspedes, un outfielder de la provincia oriental de Granma considerado como jugador de cinco herramientas, fue llevado casi en andas por la dirección de Marlins de Miami a recorrer su nuevo estadio, en La Pequeña Habana, y el mismo jugador manifestó su esperanza de alinear con los miamenses.
Según fuentes cercanas a la franquicia local, los Marlins le habían ofrecido un contrato por seis años, cercano a los $40 millones. Pero al parecer las cuentas con los Atléticos funcionaron mejor.
$6.5 millones en la primera temporada
Su agente, Adam Katz, confirmó el acuerdo, divulgado este lunes por la página oficial de las Grandes Ligas. Céspedes cobrará $6.5 millones este año, $8.5 millones en el 2013 y $10.5 millones en las dos últimas temporadas. Se convertirá en agente libre al finalizar la campaña del 2015.
¿Tendrá que ver el desenlace con una opinión del manager Ozzie Guillén, cuando dijo que Céspedes “es un pelotero de muchos “Sí”?
Guillén hablaba de los riesgos de contratar a un hombre de 26 años, una edad que no puede considerarse como de un prospecto. Además, se concluía que el muchacho viene de imponer un récord de 33 jonrones para una temporada en una Serie Nacional [de Cuba] “plagada de deserciones, lesiones y retiros recientes, lo que habla a las claras de un pitcheo disminuido en su calidad”.
Céspedes no puede permitirse el lujo, han dicho otras voces, de desperdiciar un par de años en las Menores, debe ajustarse lo antes posible a la Gran Carpa, y tiene además el reto de incorporarse a una nueva cultura.
Pero se decía que, aún conocedores de estos retos, los Marlins de 2012 contaban todavía con suficiente plata -después de olvidarse de contar cada centavo y de contratar a José Reyes, Mark Buehrle y Heath Bell, además de traer al piloto Guillén desde la ciudad de los vientos- para atreverse a quemar sus billetes con el novato cubano.
Una vieja frustración cubana
Los Marlins fallan nuevamente en el intento por incluir en el equipo un pelotero cubano que abandona las series nacionales de la isla. El último gran contrato para un desertos de la selección nacional lo obtuvo el lanzador Liván Hernández, ganador de la Serie Mundial de 1997.
Tener un jugador cubano en el róster era un atractivo adicional para la franquicia en su nuevo estadio de La Pequeña Habana.
Alguien quiso comparar antes a Céspedes con Bo Jackson -ex futbolista y ex beisbolista- pero Guillén dijo que Bo no era un pelotero de verdad, y Céspedes sí. Después hablaron de Raúl Mondesí y el manager volvió a discrepar, porque “Mondesí era mejor (que Céspedes), con mejor brazo y más rápido, aunque este cubano es realmente bueno”.
Eduardo Pérez, coach de bateo de los Marlins, afirmó en cambio que Céspedes se impondrá en las Mayores, con cualquier equipo. “Lo vi jugar en el II Clásico, en 2009, y sé que tiene todas las aptitudes, sus credenciales son más altas que las de Kendrys o Alexei”, manifestó Pérez.
Tal vez la mejor descripción de todo este show, y de los aplausos al final de la obra, los haya dado un cronista de béisbol de la Florida: “Tiene un físico perfecto, estadísticas impresionantes, un video de presentación de lujo y es capaz de meter una pelota en la Luna, pero cualquiera que le de empleo podría estar jugando a la ruleta rusa”.
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