Adiós al Jilguero de Cienfuegos, titán de la música guajira
El Jilguero recibiendo el Premio de Honor en Cubadisco 2010.
El cantante Inocente Iznaga, el popularmente conocido Jilguero de Cienfuegos, falleció el viernes en La Habana a los 81 años.
La muerte del Jilguero fue anunciada la noche del viernes en el Noticiero Nacional de Televisión, sin informar las causas del deceso.
Icono de la música guajira y autor de hitos en la preferencia popular como “La caldosa de Kike y Marina”, Iznaga impuso un estilo peculiar de interpretación, caracterizado por el humor, la picardía y un inigualable sentido de la afinación.
En el podio de la interpretación de tonadas campesinas, junto a Celina González, Reutilio Domínguez, Justo Vega, Coralia Fernández y Ramón Veloz, Iznaga tiene un ligar indiscutible. Curiosamente, era el único negro.
Nacido el 28 de diciembre de 1930, en Arimao, Cienfuegos, en el seno de una familia pobre con 12 hijos, Iznaga pudo estudiar sólo el primer grado.
Desde los siete años comenzó a asistir y a cantar en los guateques campesinos de su terruño natal hasta que, siendo aún un niño, sus seguidores lo impulsaron a participar en programas radiales en emisoras locales.
A los 13 años ya cantaba en emisoras como la CMHM y la CMHI, ambas de Cienfuegos. El éxito en los guateques radiales lo catapultó hasta RHC Cadena Azul, en 1948.
Príncipe del punto guajiro
En La Habana fue elegido Príncipe del Punto Cubano y logró presentarse con el grupo de Modesto Morejón en emisoras radiales. Por esta época inicia una relación sentimental con Martica Morejón, quien sería su compañera de aventuras musicales por largo tiempo.
Pero el Jilguero regresó a su tierra para seguir cantando por la emisora la CMHK de Cruces.
En 1956, luminarias del canto guajiro como Chanito Isidrón, Celina y Reutilio lo convencieron para que viniera a la capital y se presentara en emisoras nacionales como Radio Cadena Habana y Radio Progreso.
Entre 1957 y 1959 compartió con Jesús Orta Ruiz (El Indio Naborí) el espacio El Guateque de Apolunio, en el Canal 4 de la televisión cubana.
En 1959 se incorporó con Justo Vega al programa Patria Guajira, que transmitía diariamente Radio Cadena Habana, donde cobró fama por sus controversias con Raúl Rondón “El Bardo Camagüeyano”.
Una misión en Siria
En 1962 empezó a presentarse en el programa dominical televisivo Palmas y Cañas.
Además de la antológica guaracha “La caldosa de Kike y Marina”, entre sus éxitos más rotundos figuran “Caminito de Zaza” y “La risa”.
Fue uno de los artistas que estuvo en Siria respaldando a las tropas que enfrentaron la invasión israelí en 1973, lo que le valió un reconocimiento oficial como “combatiente internacionalista”.
En el 2010 recibió el Premio de Honor en el festival internacional CubaDisco, en La Habana.
Ostentaba la Distinción por la Cultura Nacional y la Medalla Alejo Carpentier, concedidas por el Consejo de Estado.