Cuba pierde su cuarto partido seguido frente a colegiales de EEUU

Alex Bregman dio el batazo clave del partido de anoche.

El hechizo de los universitarios estadounidenses sobre la tropa de Víctor Mesa continuó anoche en Cary, Carolina del Norte, donde los anfitriones volvieron a despachar a los cubanos por la minima, 3×2.

No recuerdo otra actuación más pobre para un equipo nacional de pelota en la arena internacional. Y digo pobre con toda intención, porque ha habido antes momentos desastrosos, pero no con resultados tan repetitivamente adversos.

Para ser justos, el equipo cubano no ha estado mal del todo, a no ser por la epidemia de bates caídos que lo aqueja y al pésimo desempeño de los receptores, a quienes solo falta que les roben los arreos. A Lázaro Herrera seis corredores le llegaron sin problemas en el intento. Lorenzo Quintana entró después y le llevaron cinco.

Cuando un equipo está en racha, todo le sale bien, hasta lo que resulta improcedente. Y la escuadra de Estados Unidos está en una ola triunfal, porque ganar como lo hicieron este lunes, bateando solo tres hits, es sin dudas un golpe de buena suerte.

Cuba bateó ocho imparables, la mayor producción de los cuatro juegos de la gira. Y arrancó ganando el partido, cuando en la tercera entrada Herrera recibió boleto, avanzó por roletazo al cuadro de Yordan Manduley y anotó por tubey de Irait Chirino. Luego José Miguel Fernández trajo la segunda del inning con metrallazo.

Todo parecía, pero…

Parecía que iba a ser la noche de despertar a la ofensiva, pero ahí quedaron las cosas.

En la lomita cubana, el derecho Joel Suárez lo hizo bien y colgó cuatro ceros a los estadounidenses hasta que en el quinto se descontroló y dio dos bases por bolas que terminarlo por perjudicarlo. Suárez no toleró hits, pero se dio el lujo de conceder seis boletos.

Víctor Mesa le pidió la bola y trajo a Ismel Jiménez. No pudo ser peor, pues el diestro espirituano fue recibido con triple de Alex Bregman, que luego entró con la decisiva por un wild pitch.

Así mismo terminó todo. En el sexto Cuba montó una amenaza por hit de Fernández (bateó de 4-2) que llevó a Ariel Sánchez hasta tercera.  Entonces vino William Luis a empuñar por Yasmani Tomás, que se ha tomado siete ponches en cuatro juegos, y mató la amenaza con un roletazo para doble play.

Al abridor Erick Fedde lo siguieron con eficiencia Tyler Beede, Daniel Mengden, Chris Díaz y Riley Ferrell, que cerró el partido con un trío de cafiroletas para los cubanos.

Cuba saldrá este martes a salvar la honrilla en el último juego del tope en el Bulls Athletic Park, en Durham. A ver si esta vez se rompe la conjura de los colegiales encantados.

 G: Tyler Beede (1-0) P: Ismel Jiménez (0-1) JS:
Riley Ferrell (1)