Una maldición china contra Cuba en el World Baseball Challenge

Una maldición china contra Cuba en el World Baseball Challenge Tienes un chino detrás de ti, solía decirse en Cuba cuando alguien atravesaba situaciones difíciles. En el 2011, un equipo beisbolero de Taipei de China anda detrás de los criollos: este domingo discuten en Prince George, Canadá, el título del torneo World Baseball Challenge.

Los asiáticos, con jugadores universitarios de 19 a 23 años -solo tienen a un jardinero de 26- vencieron tres veces en Rótterdam, Holanda, a la segunda selección cubana, y ahora en el Challenge tienen foja de 1-1 contra la novena élite de nuestro país.

Dirigidos por el villaclareño Eduardo Martín, los nacionales recorrían el calendario del Challenge con una ofensiva muy discreta, hasta que su compromiso con Bahamas les permitió despacharse con cuchara grande: en una noche, su promedio al bate ascendió de 296 a 346, con 22 hits, siete de los cuales fueron jonrones.

Antes, los criollos le habían ganado a los Tigres de Beijing, a una escuadra de Canadá, al Toshiba de Japón y al propio Taipei, los dos últimos con apretados marcadores. Pero el inicio de la fase cruzada fue testigo del desquite de Taipei -con cuatro errores de la defensiva cubana- y ese elenco tratará de vencer hoy (por quinta vez en el actual verano) a un equipo cubano.

Pero realmente Taipei se ha tomado demasiado en serio la confrontación con el béisbol cubano a todos los niveles. Y este domingo los chinitos categoría 12 años ganaron como anfitriones el Campeonato Mundial de la Asociación Internacional de Béisbol (IBAF), con una victoria de 3×2 frente a la selección infantil cubana.

Anoche los cubanos dieron muestras de vergüenza y depacharon 8×1 al Toshiba, asegurando así su presencia en la discusión del campeonato del World Challenge.

Salvar el orgullo tricolor

La crucial victoria del sábado fue obra del derecho camagüeyano Vicyohandri Odelín, quien lanzó un juegazo de seis aislados hits en ocho entradas, y de los toleteros Yulieski Gourriel y Héctor Olivera, con dos jonrones cada uno.

Pero el orgullo tricolor sólo puede preservarse con el oro del Challenge, aunque sus resultados previos den rienda suelta a un análisis crítico.

El encuentro dominical está pactado para las tres de la tarde, tiempo del Pacífico (tres horas más tarde en Cuba y en Miami), salpicado tal vez por la lluvia que acudió a todas las jornadas previas y esta vez por el desconsuelo de los organizadores canadienses, que soñaban con alcanzar medallas por intermedio de un “equipo Frankestein”, ensamblado con hombres de aquí y de allá, algunos de ellos recién retirados.

Casi al unísono con ese desafío, un tercer conjunto cubano estará inaugurando en Venezuela su participación en los denominados Juegos del ALBA, otro torneo de poca monta, pues solo serán rivales de Cuba venezolanos y nicaragüenses, acostumbrados -porque sus únicos valores juegan en las Grandes Ligas de Estados Unidos- a recibir palos de los peloteros reclutados de San Antonio a Maisí.

CATEGORÍAS
TAGS

COMENTARIOS